Declaración y Respuesta a las sanciones impuestas por el Consejo de la UE del Comité Europeo de Solidaridad con la Revolución Popular Sandinista
La declaración del alto representante, Josep Borrell, en nombre de la Unión Europea sobre Nicaragua el 4 de mayo de 2020, se expresa sin contar con ninguna prueba de lo que afirma y repite una mentira para querer hacerla verdad.
Pero los europeos y europeas tenemos otros mecanismos para informarnos sobre lo que sucede en otras latitudes del mundo y sabemos que este tipo de acciones del Consejo Europeo responde más a posiciones políticas-ideológicas que a la realidad.
Sobre todo cuando vemos a los voceros principales de estas sanciones que no tienen ni siquiera la moral para hablar de «Derechos Humanos», por representar la extrema derecha que estuvo y reivindica al fascismo y el franquismo español.
El Consejo de la Unión Europeo ha adoptado en mayo 2020 un marco para la imposición de medidas restrictivas específicas habida cuenta de la situación en Nicaragua.
Este tipo de sanciones unilaterales e ilegales sigue la política que los Estados Unidos ha implementado con todos los países que no responden a sus designios, incluso contra la Unión Europea con las medidas proteccionistas unilaterales y las sanciones y aranceles puestos por la administración Trump.
En declaraciones recientes, el Comisionado Cairo Amador de la Comisión de la Verdad, Justicia y Paz de Nicaragua, analiza las recientes sanciones de la Unión Europea /mayo 2020 y expresa que aunque el Gobierno de Nicaragua tenga la razón, jamás se la van a dar. También resalta otros temas como el del Sistema Salud nicaragüense considerado el segundo mejor del mundo y las diferentes controversias contra Nicaragua.
De igual forma, en marzo 2020 también dio declaraciones sobre el estado de los compromisos y acuerdos de marzo 2019 (Declaraciones del Comisionado doctor Cairo Amador de la Comisión de la Verdad, Justicia y Paz de Nicaragua) donde declara que muchos de los acuerdos se han ido resolviendo vía el diálogo entre nicaragüenses, que es el único camino a seguir sin interferencias extranjeras sobre todo si responden a posiciones ideológicas y no dentro de los marcos del multilateralismo.
Nosotros consideramos que las nuevas sanciones son unilaterales e ilegales dentro del marco de la Carta de las Naciones Unidas, según el Capítulo I, artículo 2, literal 4 y 7. Tanto la UE como la derecha nicaragüense no han parado sus ataques, sí, ataques… antes violentos y ahora de mentiras sin reconocer la acción global y el esfuerzo sincero que ha hecho el gobierno de Nicaragua para garantizar la paz territorial (aspecto éste logrado desde la finalización de los actos violentos de la derecha nicaragüense en 2018) y la recuperación económica donde los pequeños y medianos productores del país (quienes fueron los más afectados económicamente junto al resto de la población ) se han dedicado a reactivar la economía y lograr nuevos niveles de bienestar, que habían perdido a causa de la violencia generada por la derecha con la intención de derrocar un gobierno democráticamente electo por los nicaragüenses.
Declaración del alto representante, Josep Borrell, en nombre de la Unión Europea sobre Nicaragua, el 4 de mayo de 2020, se expresa sin contar con ninguna prueba de lo que afirma y repite una mentira para querer hacerla verdad. Pero los europeos y europeas tenemos otros mecanismos para informarnos sobre lo que sucede en otras latitudes del mundo y sabemos que este tipo de acciones del Consejo Europeo responde más a posiciones políticas-ideológicas que a la realidad. Sobre todo cuando vemos los voceros principales de estas sanciones que no tienen ni siquiera la moral para hablar de «Derechos Humanos» por representar un extrema derecha que estuvo y reivindica al fascismo y el franquismo español.
Luego Josep Borrell tiene la ironía en su discurso sobre las sanciones a Nicaragua decir:
«La UE recuerda que la pandemia del Covid 19 refuerza la necesidad de cooperación internacional; y que la UE está dispuesta a ayudar a Nicaragua en estos tiempos difíciles. En este período desafiante, el respeto de los derechos humanos no debe olvidarse y debe estar en el centro de cualquier acción. La UE reafirma su compromiso de apoyar al pueblo nicaragüense, incluyendo el fortalecimiento del estado de derecho y el desarrollo económico y social de los más vulnerables».
Si observamos, los organismos internacionales que llevan la información actualizada de la pandemia del coranovirus en el mundo, se observa que el cuadro oficial y hasta la fecha, Nicaragua tiene apenas 5 personas fallecidas por el coronavirus, que lamentamos de igual manera. ¿Qué lección puede dar la Unión Europea en el tratamiento que le han dado a la pandemia?
Hipocresía total, ya que no se ocuparon del derecho a la VIDA ni siquiera de una población frágil de europeos. Ni con Italia ni con España, la Unión Europea y su Consejo fueron capaces de reaccionar con anticipación a esta pandemia a pesar de la alarma de la OMS y pretende hacerlo con Nicaragua, que además ha realizado desde el 2007 un política sanitaria de prevención, sobre todo a nivel de enfermedades respiratorias, dadas a su situación climática humedad y que ha dado efectos sorprendentes en este periodo de pandemia mundial.
Pero eso sí, el Consejo Europeo tienen la arrogancia de «sancionar» en medio de la pandemia mundial a un país que podría darles lecciones de salud pública y prevención como es la Nicaragua Sandinista, siempre preservando todos los derechos humanos de la población.
La UE jamás podrá negar y además ella debería reconocer con vergüenza, el estado catastrófico de la sanidad pública en Europa. Para muestras vean las cifras de contaminados y que hasta la fecha continúan sucediendo en el mundo, según las fuentes internacionales.
Nosotros, como Comité Europeo de Solidaridad con la Revolución Popular Sandinista, conscientes de que el continente europeo no está, desde ya hace bastante tiempo en condiciones de dar lecciones de derechos humanos, cuando sólo implementa políticas neoliberales que han llevado a la exclusión y al empobrecimiento de la mayoría de trabajadoras y trabajadores europeos; un continente que lo que ha hecho es «unirse» para que el mundo financiero y los sectores productivos se alineen a una globalización a la media de los Estados Unidos, perdiendo toda capacidad de independencia y proposiciones que preserven la vida de la población europea y apoyen al resto del mundo.
Un continente que habla de derecho y libertad de prensa y sabemos que solo existen cuatro o cinco grandes corporaciones de la « información » que con base a los intereses de sus accionistas, dicen y/o manipulan lo que a ellos les interesa; un continente que ha sido colonizador tanto en África como en América y que pretende seguir posesionando sus políticas neocoloniales como si los otros continentes no han alcanzado su propio desarrollo, e incluso podrían darles lecciones de lo que un «buen desarrollo de país» pasa por la atención primordial de su población en todos los sectores básicos para la vida : Salud, Educación, Cultura, Trabajo, Infraestructuras y Seguridad Social y física en ambientes de PAZ. Podemos decir:
«En Nicaragua no hay crisis política. El gobierno está a la altura de sus prerrogativas, el Parlamento nacional desempeña regularmente y con calma el papel legislativo y los órganos institucionales territoriales funcionan regularmente. La “crisis política grave” es solo la que está dentro de la oposición, donde el choque para conquistar la representación del antisandinismo se debe fundamentalmente a la lucha para incautar las decenas de millones de dólares al año de los estadounidenses y europeos, así como para obtener un papel político y visibilidad en los medios que por sí solos no tendrían nunca».
Consideramos que el Consejo Europeo debería ocuparse más en resolver los graves problemas y desequilibrios que vive el Continente y, especialmente, las grandes dificultades que viven sus pobladores y que con esta primera pandemia del siglo XXI y todo lo que han tenido que sufrir con la supuesta « unión europea » desde arriba y no desde los intereses de los ciudadanos solo los ha llevado a desahucios o pérdidas de vivienda, gran desempleo, represiones policiales, violencia intra familiares, alto costo de la vida, y ahora miles de fallecidos por falta de un sistema de salud público.
Que el Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad y Vicepresidente de la Comisión Europea promueva y desarrolle políticas constructivas y de intercambio respetuoso con la República de Nicaragua, ya que esta República es independiente, soberana y además creyente en el multilateralismo y en el respecto de todos los países, por lo cual espera que la Comisión y sus representantes dejen de expresar sus posiciones ideológicas y políticas partidistas para actuar contra otras naciones y personalidades que no compartan sus posiciones.
Exigimos como ciudadanos europeos que no intervengan en los asuntos internos de otros países y principalmente, de la República de Nicaragua con quien más bien nos unen lazos históricos de intercambios culturales y que le ha ofrecido a todos los europeos que la han querido ir a visitar (en especial desde el 2007) un territorio amigo, hospitalario, seguro, generoso y sincero para disfrutar de la VIDA en PAZ.
¡Retiro inmediato de la sanciones unilaterales e ilegales contra la República de Nicaragua y sus dirigentes!
Comité Europeo de Solidaridad con la Revolución Popular Sandinista