Rusia Today | Elson Concepción Pérez (Granma)
Elaine Duke, exsecretaria adjunta de Seguridad Nacional del presidente de EEUU, Donald Trump, ha asegurado que éste propuso «desinvertir» o «vender» el Estado Libre Asociado de Puerto Rico tras ser azotado por el huracán María en 2017, según lo revela en una entrevista con The New York Times.
«Las ideas iniciales del presidente fueron más las de un hombre de negocios», explica Duke. «¿Podemos externalizar la electricidad?, ¿podemos vender la isla?, ya sabes, ¿o desinvertir en ese activo?», habría dicho el mandatario estadounidense. No obstante, la exfuncionaria precisó que esa sugerencia nunca fue considerada o discutida en serio.
Fuente de decepción
Duke indica que la respuesta de la Administración Trump al desastre natural —que se cobró la vida de más de 3.000 personas— fue «una fuente de decepción».
La exfuncionaria asegura que antes de que el huracán tocara tierra en Puerto Rico abogó por una declaración de emergencia en el territorio, pero que el entonces director de presupuesto de Trump, Mick Mulvaney, se negó. «Deja de ser tan emocional, Elaine. No se trata de la gente, se trata del dinero», le habría dicho Mulvaney, que ha negado haber hecho tales declaraciones.
Aunque Duke reconoce que se sintió contenta cuando, al día siguiente, el presidente estadounidense expresó su preocupación por el pueblo puertorriqueño, dicho sentimiento se tornó en frustración poco después debido a que Trump intercambio tuits enojados con los políticos de la isla. «Toda la energía negativa es una distracción», sostiene.
Lleno de odio
Por otro lado, la ex secretaria adjunta de Seguridad Nacional afirma en la entrevista que la actual Administración a menudo se mueve por ideología en lugar de la deliberación, y que el presidente adopta un lenguaje «lleno de odio, enojado y divisivo». Duke confiesa que no sabe si votará por Trump en elecciones presidenciales del próximo 3 de noviembre.
Por otra parte, aunque asegura que apoya los esfuerzos del inquilino de la Casa Blanca por reforzar la seguridad migratoria, lamenta que la filosofía de Trump de «América primero» se haya desviado hacia el «Solo América». En este sentido, critica la política de separar a las familias a lo largo de la frontera, que su sucesor aprobó meses después de que ella abandonara el cargo. «Una de las formas en que tenemos espacio para ayudar a la gente es a través de nuestro sistema de inmigración», afirma.
Por último, la exfuncionaria piensa que la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés) «no es un programa legal», a pesar de que en 2017 ella misma firmó —bajo presión— un memorando para finalizarlo. «Es una decisión grave, no solo desde un punto de vista legal, sino por el efecto que tendrá en […] 700.000 personas y sus familias», concluye.
Otra humillación de Trump más a Puerto Rico
La verdad es que ahora se conoce que el inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, propuso vender la Isla, tras haber sido azotada por el huracán María.
Se trata del mismo mandatario que negó recursos a ese país con la etiqueta de Estado Libre Asociado de Estados Unidos, cuando ciclones y tormentas lo embistieron en los últimos años, y que, si acudió alguna vez allí, ante el reclamo de recursos para reconstruirlo, lo hizo para posar ante las cámaras lanzando rollos de papel sanitario a los pobladores.
Sin duda, se trataba de un interés marcado por humillar a los puertorriqueños. Pero no parecía entonces que al magnate presidente se le ocurriera otra desaguisada idea.
Sin embargo, el pasado domingo ha salido a relucir un componente, hasta ahora no divulgado, de su actuación.
El diario The New York Times ha publicado una entrevista con Elaine Duke, exsecretaria de Seguridad Nacional del presidente Trump, en la cual asegura que el mandatario propuso «desinvertir» o «vender» a Puerto Rico, tras haber sido azotado por el huracán María en el año 2017.
Es una empecinada política de especulador financiero, para nada acorde con la cordura y la ética que un presidente debe tener.
Olvidó Trump cuánta dignidad puede existir entre los cuatro millones de habitantes de esa Isla, cuánta aspiración de libertad y soberanía frustradas o cuánto derecho a ser una nación soberana, sin el triste lastre de colonia que los gobiernos de Estados Unidos persisten en mantener.
En la citada entrevista, la funcionaria Elaine Duke reconoce que las ideas del Presidente, en esa ocasión, fueron más las de un hombre de negocios, y recuerda lo dicho entonces por Trump: «¿Podemos externalizar la electricidad?, ¿podemos vender la isla?, ya sabes, ¿o desinvertir en ese activo?».
Duke indica que la respuesta de la Administración Trump ante el desastre natural –que cobró la vida de más de 3 000 personas– fue «una fuerte decepción».
Por su parte, el exgobernador de Puerto Rico, Aníbal Acevedo, denunció que Trump indagó sobre la posibilidad de vender Puerto Rico como si fuera un activo de uno de sus «negocios turbios», según reportes de Hispantv.
Recordemos que el excéntrico Presidente de Estados Unidos, en el año 2019, quiso comprar Groenlandia a Dinamarca, y cuando las autoridades danesas se mostraron ofendidas por tal iniciativa, Trump suspendió un viaje oficial, planificado con anterioridad, a ese país, de acuerdo con reportes de Wall Street Journal.
Ese es el Presidente de Estados Unidos, el mismo que se apresura en conquistar adeptos para que voten por él en los comicios de noviembre próximo. (E C P.)