La Ley Habilitante ‘Antiimperialista’, que le concede al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, los poderes especiales para gobernar por decreto hasta el final de año, con el fin de defender la soberanía del país contra «amenazas imperialistas» de EE.UU., entró en vigor el lunes.
La Asamblea Nacional de Venezuela aprobó la Ley Habilitante ‘Antiimperialista’ el domingo pasado. La normativa, que consta de cuatro artículos, le otorga más poderes al líder bolivariano, Nicolás Maduro. La decisión fue tomada después de que EE.UU. calificara a Venezuela como «una amenaza extraordinaria» a la seguridad nacional de Washington.
Maduro declaró en la reunión con los comandos militares contra la guerra económica, que «Venezuela no es la amenaza de nadie, sino la esperanza del mundo».
El sociólogo estadounidense, James Petras, por su parte, ha afirmado que lo que quiere Washington en esta situación es derrocar al mandatario para debilitar a toda Latinoamérica.
«Es cierto que Venezuela, primero con el presidente Chávez y ahora con presidente Maduro, apoya planes de integración de organizaciones latinoamericanas que excluyen a EE.UU.», explica Petras. De acuerdo con el experto, organizaciones como Celac, Unasur, ALBA y PetroCaribe son puramente latinoamericanas y debilitan la capacidad de dominación por parte de EE.UU.
«Washington está enojado porque Venezuela está al frente en la integración latinoamericana y busca derrocar al Gobierno venezolano para debilitar esa integración», afirma el sociólogo.