* El narco-estafador Gerardo Sánchez, actualmente operando en Costa Rica, en diálogo con uno de sus reclutas más desequilibrados y con mentalidad asesina.
¿De quién se rodea el aspirante a jefe del “ejército” de frustrados golpistas que pululan en Costa Rica? El terrorista Ramiro Coronado, alias “Chico Chico”, es un ejemplo de la demencia criminal de algunos sujetos antisandinistas que abundaron entre quienes creyeron que Gerardo Sánchez, el “guerrillero virtual”, era el mesías que vendría a liberarlos del FSLN.
“Chico Chico” llegó a proponerle al estafador Gerardo Sánchez hacer explotar gasolineras que presuntamente eran propiedad del presidente de la República Daniel Ortega y Carlos Pellas, sin importarle la mortandad que causaría una acción de esa envergadura.
Ante la propuesta del estafador haciendo creer que puede derrocar al FSLN, y sacar así dinero a los somocistas y opositores antisandinistas, el asesino demente “Chico Chico” se devela como “estratega militar”, y le propone que con cuarenta reclutas enfrente con éxito al Ejército de Nicaragua.
La cierto de todo esto es que se trata de una conversación entre ignorantes, estafadores y megalómanos que sueñan con derrocar al gobierno sandinista utilizando una laptop desde un cuartucho en Costa Rica, país que por cierto permite operar libremente a Sánchez y a otros embaucadores.
Gerardo Sánchez, locuaz por naturaleza, se nota parco ante el planteamiento de “Chico Chico” de enfrentar con armas al Ejército de Nicaragua, acción en la que por supuesto no estaría Ramiro Coronado.
¿De dónde sacaría una tropa el estafador Sánchez para enfrentar a la policía o al ejército, de su laptop?
Esta es una parte del diálogo entre el estafador Gerardo Sánchez y su recluta “Chico Chico”:
