Jesús Inojosa | UN
Recientemente el presidente de la República, Nicolás Maduro, denunció que el Gobierno de los Estados Unidos, ejecuta una campaña mediática contra Venezuela «con el fin de desprestigiar a nuestra Patria con mentiras y engaños».
Al respecto, señaló a la Voz de América (VOA), servicio de radio, televisión y web del gobierno estadounidense, de ser la encargada de instrumentar este plan mediático que Abrams anunció el pasado 11 de julio bajo la premisa de una «ofensiva comunicacional”.
¿Qué es la VOA?
Se autodefine como «un servicio internacional de difusión de medios múltiples. Este servicio es responsable de presentar con claridad las políticas de los Estados Unidos al mundo y ser una fuente fidedigna de noticias».
Los primeros pasos para su nacimiento se dan en 1941, antes de que se suscitara la entrada de Estados Unidos en la segunda guerra mundial, cuando el gobierno de Franklin D. Roosevelt crea el Servicio de Información de Radiodifusión Extranjera (FBIS por sus siglas en inglés), como parte de un programa perteneciente a la dirección de ciencia y tecnología de la Oficina de Servicios Estratégicos, hoy Agencia Central de Inteligencia (CIA por sus siglas en inglés).
Su objetivo era la creación de contenidos para promocionar información y propaganda sobre el modelo de progreso que estaba en auge en la nación norteamericana, producto del New Deal. Sus primeros objetivos fueron Europa y Asia, continentes que estaban sumergidos en el conflicto y donde se redifiniría el equilibrio global post guerra.
Es así como para el 1 de febrero de 1942, el FBIS pone en marcha el proyecto Voz de América, que con transmisores de onda larga y media de la BBC, inicia transmisiones en Europa.
Con apenas meses de su instalación, sus mensajes eran difundidos en más de una veintena de idiomas y su señal tenía presencia en toda Europa, América parte de Asia y África. Tras culminar la segunda guerra mundial e iniciarse la denominada «guerra fría», es traspasada a la Agencia de Información de los Estados Unidos (USIA).
Ya en la década de los 90 es nuevamente transferida a la Agencia de Estados Unidos para los Medios Globales (IBB por sus siglas en inglés) donde ha permanecido hasta el día de hoy como una herramienta del gobierno estadounidense para «promover» su modelo de sociedad y democracia.
La VOA en acción
Además de la operación lanzada en Europa durante la segunda guerra mundial, el 17 de febrero de 1947, lanza su señal hacia el territorio de los países que conformaban el bloque socialista europeo, así como en la Unión Soviética, como parte de las acciones que promovían las agencias estadounidenses en la llamada «guerra fría».
Además de la difusión de sus contenidos y mensajes a través de sus radioemisoras y tv, VOA utiliza a diversos medios de comunicación para la colocación de sus contenidos tal como sucedió en España entre 1955 y 1993.
Este historial fue inspiración para la «ofensiva comunicacional» que la administración de Ronald Raegan planificaba contra Cuba, siguiendo los consejos de su subsecretario de Derechos Humanos y Asuntos Humanitarios, Elliott Abrams, quien puso en marcha Radio Martí el 20 de mayo de 1985, con el objeto de promover contenidos anticastristas entre los pobladores de la isla.
En los primeros años de Radio Martí, la VOA fue fuente principal para la creación de los programas especiales que se difundían en esta radioemisora con sede en Miami y posteriormente colaboró en la creación de Tv Martí en 1990, para la cual también creó programación.
Actualmente, la VOA mantiene operaciones en la mayor parte del mundo y sus antenas han sido instaladas en varios países donde EEUU mantiene operaciones militares como Afganistán e Irak, desde dónde emiten señal hacia Asia y Medio Oriente.
Contrario a lo que se creería, estos «servicios informativos», no podían ser transmitidos en Estados Unidos por mandato de la Ley Smith-Mundt promulgada en 1948 y derogada en 2013, que prohibía la difusión de estos mensajes, por considerarlos como un mecanismo de manipulación de la voluntad de los ciudadanos.
Objetivo Venezuela
Tras la denuncia hecha por el presidente Maduro, donde hace mención a la VOA, el 18 de julio surge una publicación por parte de la revista «Guyana Chronicle«, que informaba sobre la negativa del Gobierno guyanés a una solicitud realizada por la administración estadounidense, dirigida a instalar equipos radioeléctricos en su territorio para la emisión de la señal de VOA hacia Venezuela.
“No está en nuestro interés nacional hacer algo que contribuya a desestabilizar las relaciones” con Venezuela, subrayó la directora de Comunicaciones de la Presidencia de Guyana, Ariana Gordon, citada por la misma revista.
«Se comprueba la denuncia del presidente Nicolás Maduro sobre la política ilegal anunciada por voceros de EEUU para invadir nuestro espacio radioeléctrico. El Gobierno de Guyana reconoce que recibió la solicitud de Washington y se negó a prestarse para desestabilizar a Venezuela», dijo el canciller venezolano, Jorge Arreaza, quien agradeció la decisión del gobierno guyanés.
El surgimiento de esta noticia en Guyana, ha puesto en relieve la ejecución de esta «ofensiva comunicacional» liderada por Abrams, que tal como lo hizo en la década de los 80 contra Cuba, sin éxito político, busca penetrar el espacio radioeléctrico venezolano, para promover la señal de este medio, que históricamente ha sido utilizado como instrumento propagandista de los intereses e «ideas» estadounidenses, con el objeto de socavar Gobiernos que sean contrarios a los dictámenes de Washington.