El congresista invitó días antes al presidente ruso, Vladímir Putin, y a su homólogo de Ucrania, Volodímir Zelenski, a realizar unas conversaciones de paz en Arizona.
«De hecho, lo inusual de la situación en Ucrania consiste en el alto nivel de incitación a la guerra por parte de terceros bandos, incluidos EEUU y el Reino Unido. Esas terceras partes parecen estar dispuestas a sacrificar las vidas de los rusos y los ucranianos, guiadas por motivos que no encajan en ninguna lógica», dijo el congresista a la agencia.
Según Gosar, esos países «no han hecho nada desde 2014, mientras esa guerras proxy activa solo se estaba gestando, y había tiempo para resolver los problemas colindantes».
«Finalmente, se mantiene una preocupación de antaño de que la familia de [el presidente] Joe Biden, con sus conexiones financieras en Ucrania, adoptó una posición ilógica sobre la paz, obligando a los demócratas, generalmente orientados hacia la paz, a entrar en un régimen de guerra, sin ninguna razón aparente que pueda beneficiar a EEUU», agregó.
El político republicano a finales de octubre publicó una carta en la que invitó a Putin y a Zelenski a la ciudad de Phoenix (Arizona) para llevar a cabo las conversaciones de paz. Como destacó Gosar, Phoenix está ubicado lo suficientemente lejos de la zona del conflicto y de las organizaciones que «estimulan la guerra», para servir en calidad de plataforma a un diálogo productivo sobre el tema.