El narcoestafador Gerardo Sánchez hace nombramientos a diestro y siniestro entre sus reclutas, por lo que no es raro conocer en una conversación que sostuvo con Enrique Castillo, un somocista tan embaucador como él, que tenía una “tesorera” en Costa Rica, donde recibían las ayudas materiales y económicas.
Vuelve con el tema de los expulsados de su organización fantasma, como Mayra Dávila y el mesero José Ramón Gutiérrez, quienes según el narcoasesino Sánchez, andaban desprestigiando a su ficticia Coordinadora Guerrillera al señalarlo como estafador.
¿Puede desprestigiarse algo tan sucio y que solo existe en la laptop de este consumado narcoestafador y asesino confeso?
Juega con el somocista Castillo a ser el gran conspirador, cuya vida corre peligro por los presuntos delatores, y el otro delincuente finge creerle y le soba el ego llamándole “comandante”. ¿Qué pensarán ahora los viejos reclutas del narcoasesino Gerardo Sánchez tras conocer que fue detenido con droga en Nicaragua en 2015 y que fue puesto en libertad después de un corto periodo en prisión?
Como no sabe hacer otra cosa que estafar, robar, distribuir drogas y matar, volvió de inmediato a las andadas en vez de aprovechar la oportunidad de reivindicación que le dio la justicia nicaragüense.
Este es un fragmento de la conversación entre el narcoasesino Gerardo Sánchez y el timador somocista Enrique Castillo:
