La posibilidad de que Nicaragua produzca vacunas contra la gripe para toda América Latina y el Caribe, «está molestando mucho a EEUU y al lobby de la farmacéutica norteamericana», dijo a Sputnik el periodista italiano Giorgio Trucchi, radicado en Nicaragua y especializado en Centroamérica.
El Instituto Latinoamericano de Biotecnología Mechnikov se instaló en Nicaragua en 2016 y fue el producto de un proyecto de cooperación entre el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social y la Federación Rusa, a través del Instituto de Vacunas de San Petersburgo.
Desde su concepción, el laboratorio tuvo como uno de sus objetivos el desarrollo de hasta 30 millones de vacunas contra la influenza al año. La cifra, que supera ampliamente lo requerido por Nicaragua, abre la posibilidad para que el país centroamericano se convierta en proveedor para América Latina y Centroamérica.
Para Trucchi, se trata de una «experiencia increíble» que se consolidará como «una alternativa real para acabar con la hegemonía de la farmacéutica norteamericana», principal proveedor hasta el momento de los países de la región.
El analista advirtió que, desde su génesis, el emprendimiento recibió críticas por parte de los «grandes medios». Algo que se explica porque «esta historia está molestando mucho a EEUU y al lobby de la farmacéutica por el hecho de que haya independencia en un tema tan importante como la salud».
Trucchi aseveró que la producción del laboratorio Mechnikov logrará insertarse en el sistema de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) «para que se pueda distribuir a un costo bajo» a los países de la región.
Una situación que, sin dudas, «está afectando los intereses de las multinacionales farmacéuticas».