Prensa Latina
La oposición nicaragüense recurrió nuevamente a la Organización de Estados Americanos (OEA) para alcanzar sus objetivos políticos ante la falta de apoyo interno, y aspira a reiniciar hoy las negociaciones con el Gobierno.
La Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD) envió una tercera carta al Consejo Permanente de la organización continental en la que pide acelerar la creación de una comisión de alto nivel que se encargaría de evaluar sobre el terreno la situación en la nación centroamericana.
La organización opositora también solicitó que Yolande Yvonne Smith, presidenta del citado Consejo, sea parte integrante de la comisión y se notifique sobre el inicio del plazo de los 75 días previstos para presentar el informe sobre la visita.
Ambas disposiciones fueron aprobadas como parte de la resolución La situación en Nicaragua en el 49 periodo de sesiones de la Asamblea General de la OEA, que sesionó a finales de junio en Medellín, Colombia.
Entre las consideraciones del documento figuran el tema de las reformas electorales, que sea readmitida en el país la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y el reinicio de las negociaciones entre los representantes del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional y la opositora ACJD.
El 18 de julio la ACDJ envió una carta al canciller Denis Moncada donde anuncia que a partir de hoy se presentarán en el Instituto Centroamericano de Administración de Empresas (Incae), sede del anterior proceso de negociación, a la espera de la delegación gubernamental para reiniciar el proceso.
Sobre la vuelta al diálogo, la OEA desconoce que fue la oposición quien abandonó de manera unilateral el proceso anterior, sin embargo el Gobierno cumplió todo los acuerdos firmados de manera consensuada y en los plazos previstos.
La falta de seriedad en los planteamientos políticos, la diversidad de tendencias dentro de la ACDJ y el modo de comportarse durante el proceso, en ocasiones violatorios de la Hoja de Ruta aprobada para la Mesa de Negociaciones.
Dicha conducta llevó al gobierno a rechazar un nuevo proceso de diálogo, aunque mantiene su compromiso con las reformas electorales y otros puntos acordados, confirmó el presidente Daniel Ortega durante el acto central por la celebración del triunfo de la Revolución Popular Sandinista el pasado 19 de julio.
Entonces el mandatario advirtió que el único diálogo posible sería con todos aquellos que estén dispuestos a trabajar por la paz y el desarrollo económico y social en este país.
De acuerdo con el presidente Ortega, ese es el único diálogo que tiene sentido, el único diálogo que tiene cabida en las actuales circunstancias históricas que vive Nicaragua.