Un estudio realizado por investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de California, San Diego, Estados Unidos, ha descubierto que los fumadores que consumen cigarrillos electrónicos (e-cigarrillos) tienen un 49 por ciento menos de posibilidades de reducir el consumo de tabaco normal y un 59 por ciento menos de dejar de fumar en comparación con aquellos que nunca han probado los e-cigarrillos. Los autores de la investigación, cuyas conclusiones se publican este jueves en ‘American Journal of Public Health’, siguieron a mil fumadores de California durante un año.
«Basándonos en la idea de que los fumadores utilizan los cigarrillos electrónicos para dejar de fumar, la hipótesis es que los fumadores que consumen estos productos tendrían más éxito en dejar de fumar», explica Wael Al-Delaimy, profesor y jefe de la División de Salud Pública Global en el Departamento de Medicina de Familia y Salud Pública de la Universidad.
«Pero la investigación reveló lo contrario. Necesitamos más estudios para responder por qué no pueden dejar de fumar. Una hipótesis es que los fumadores están recibiendo un aumento de la dosis de nicotina mediante el uso de los cigarrillos electrónicos», plantea este científico.
Aunque los cigarrillos electrónicos no contienen tabaco, los consumidores, conocidos coloquialmente como «vapers», exhalan una mezcla de compuestos orgánicos volátiles, metales pesados y partículas ultrafinas que generalmente contienen nicotina en aerosol en una nube de vapor.
Los resultados muestran que los fumadores y las mujeres eran más propensos a probar los e-cigarrillos. Al-Delaimy cree que el estudio aporta información a la agencia norteamericana del medicamento y otros reguladores sobre el perfil de consumo de e-cigarrillos entre los fumadores a la hora de diseñar directrices de regulación de los e-cigarrillos.
Fuente: lainformacion.com