Juventud Rebelde
* Por orden militar declaran ilegales a esos grupos y las acusan de vínculos con el terrorismo.
El ejército israelí allanó las oficinas de varias prominentes organizaciones palestinas de derechos humanos en Cisjordania, grupos que había declarado ilegales por presuntos vínculos con el terrorismo en octubre, sellando sus puertas y dejando avisos oficiales declarándolos «ilegales».
Al-Haq, uno de los grupos de derechos humanos más prominentes en Cisjordania —establecido en 1979—, que trabaja para procesar a Israel en la Corte Penal Internacional en La Haya, informó que soldados israelíes irrumpieron en sus oficinas de Ramalah y dejaron una orden militar declarando a la organización ilegalizada.
«Vinieron, volaron la puerta, entraron y se metieron en los archivos», dijo Shawan Jabarin, director de Al-Haq, a la agencia noticiosa Associated Press. Agregó que, si bien no se confiscó nada de las oficinas de su organización, otros grupos han informado que sus oficinas fueron limpiadas completamente.
«La incursión en la iglesia es total y totalmente condenada, no solo por nosotros, estoy seguro por todos los amantes de la paz en el mundo, y por todos los que piden la libertad para el pueblo palestino», dijo el primer ministro palestino Mohammad Shtayyeh durante una visita a la oficina de Al-Haq dentro de la Iglesia Evangélica St. Andrews de Ramalah.
«Estas organizaciones han trabajado duro con nosotros en el espíritu de asociación para llevar a Israel a la corte penal internacional por lo que han hecho contra nuestro pueblo en Gaza, en Cisjordania, en Jerusalén, en todas partes», agregó Shtayyeh.
Otras tres organizaciones allanadas fueron Addameer, Bisan Research Center y la Unión de Comités Palestinos. Addameer reporto que las fuerzas israelíes echaron abajo las puertas de su oficina y confiscaron materiales.
Según Middle East Eye, entre los grupos allanados se incluyen la Unión de Mujeres Palestinas, Defensa Internacional para los Niños Palestinos, la Unión del Comité de Trabajo Agrícola y el Comité de la Unión de Trabajadores de la Salud.
En octubre pasado Israel declaró como organizaciones terroristas a seis de estos grupos (excluyendo al de los trabajadores de la salud), acusación que fue criticada tanto por las Naciones Unidas como por organizaciones internacionales de derechos humanos.
Tahkeem Alyan, director de programas de Al-Haq, dijo a MEE que la incursión y la incautación de materiales importantes por parte del ejército «se esperaba a la luz de la continua incitación israelí contra las instituciones palestinas, que tiene como objetivo demonizarlas y cortar la comunicación con el mundo».
«Israel no quiere que nadie lo haga responsable de sus crímenes y sea llevado a juicio, y esto es lo que le molesta y lo motiva a tomar esta acción contra la institución. Al-Haq ha reabierto sus puertas, y continuaremos trabajando en ello, y no sucumbiremos a esta decisión», dijo Alyan.
Israel continúa persiguiendo a los grupos palestinos de derechos humanos y de la sociedad civil con el claro objetivo de silenciar cualquier crítica en su contra, un esfuerzo dirigido por el ministro de Defensa, Benny Gantz, quien es acusado de cometer crímenes de guerra, e intenta aterrorizar a quienes testificarán contra él y sus acciones, denuncian organizaciones palestinas.
El primer ministro palestino declaró que esas instituciones y todas las registradas ante el Estado de Palestina son instituciones legales que operan dentro de la ley y les llamó a que reasuman su trabajo a pesar de la acción del ejército de Israel.
El m es pasado, nueve países europeos (Alemania, Bélgica, Dinamarca, Francia, Irlanda, Italia, Países Bajos, España y Suecia—, dijeron en una declaración que continuarían cooperando y apoyando fuertemente a la sociedad civil de los territorios palestinos ocupados porque Israel no ha probado sus alegatos de que son organizaciones terroristas.
«Una sociedad civil libre y fuerte es indispensable para promover los valores democráticos y para la solución de dos Estados», dijeron.