“Académico” deslumbra al narcoasesino

El narcoasesino Gerardo Sánchez en su covacha, cuando trabajaba como CPF en Costa Rica. Ahí sufrió una metamorfosis y se convirtió en el «comandante Roberto Palacios».

De farsante a farsante. El narcoestafador se topó con su alter ego en lo que a ficciones se refiere. Se trata de un sujeto que dijo llamarse Eduardo Sánchez, todo un “experto”, según él, en política internacional y diplomacia, y miembro de la Academia de Ciencias Políticas de Estados Unidos.

El asesino confeso Gerardo Sánchez quedó inmediatamente deslumbrado por la eminencia que le escribía, por lo que aprovechó para solicitarle consejos a fin de “derrocar y terminar” al gobierno sandinista del comandante Daniel Ortega.

El consejo del flamante “académico” fue tan simple como inalcanzable en su contenido: crear supuestos líderes en territorios considerados en conflicto, promover huelgas, manipular a los medios de comunicación de derecha, de tal forma que logren llamar la atención de organismos internacionales, y buscar a un gobierno “amigo” que los represente en la OEA y la ONU.

Es decir, puso el retorno del somocismo en “los cuernos de la Luna”. Hasta pareciera que la lumbrera de Eduardo Sánchez asesoró a los frustrados y derrotados golpistas de 2018.

El narcoguerrillero virtual le confesó que estaba largo de conseguir eso, y tenía razón: su lucha, o, mejor dicho, sus estafas, las realiza desde una computadora.

Parte de la conversación entre el narcoasesino Gerardo Sánchez y la “lumbrera” Eduardo Sánchez:

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