Las políticas económicas del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, propiciaron la caída de Silicon Valley Bank (SVB), un hecho que provocará rescates financieros para evitar una mayor crisis en el país norteamericano, aseguró en una entrevista para Sputnik el legislador republicano, Paul Gosar.
Según el congresista republicano, la mayor parte de los depósitos de Silicon Valley Bank estaban colocados en hipotecas y en bonos del Tesoro, ya que, durante la Administración Donald Trump, las tasas de interés eran bajas y esta decisión parecía «una buena inversión».
La propia secretaria del Tesoro, Janet Yellen, confirmó que los aumentos de las tasas de interés, medida para intentar reducir la inflación que vive Estados Unidos, fue uno de los factores que llevaron a la caída del SVB.
De hecho, el 12 de marzo, la Reserva Federal de Estados Unidos rescató a todos los clientes del que llegó a ser uno de los bancos más fuertes del país. Según las autoridades estadounidenses, este rescate no afectará al contribuyente estadounidense.
Un día después, el 13 de marzo, el grupo financiero HSBC anunció la adquisición de la filial británica del Silicon Valley Bank (SVBUK), por solo una libra esterlina.
El derrumbe del SVB, provocado directamente por la falta de liquidez, ha generado una turbulencia en el sistema bancario estadounidense, no visto desde la crisis de 2008.
Dos días después de la caída de este banco, las autoridades federales de Estados Unidos anunciaron, también, el cierre de Signature Bank ante lo que podría iniciar un efecto en cadena en todo el sistema bancario.
Este 16 de marzo, 11 bancos de Estados Unidos acordaron inyectar recursos al First Republic Bank, institución parecida al SVB en riesgo de caer en falta de liquidez, lo que ha llevado a consultoras como Moody’s a reducir la calificación del sistema bancario estadounidense de «estable» a «negativa».