El tacaño Jaime y la ingrata Hilda

Para el director de La Prensa, Jaime Chamorro Cardenal, los esfuerzos que  los médicos hacen para conservar la salud y la vida de su familia no merecen para nada de un agradecimiento, menos aun cuando su tacaña frialdad se pone de manifiesto, tal como lo demostró al considerar onerosa la cuenta de tan solo 18 dólares por una atención de sumo cuidado que recibió se esposa.

 

Este comportamiento sórdido de Chamorro Cardenal ocurrió cuando Hilda Argeñal de Chamorro, su esposa, sufrió un serio problema en la vejiga por lo que la llevó a un consultorio médico en donde la atendieron, pero como se complicó, la llevó a un hospital donde le aplicaron un medicamento que la mejoró y fue allí que le cobraron la “gravosa” suma de 18 dólares.

Sin embargo, una vez mejorada, doña Hilda se autorrecetó un vaso de agua por hora pensando que le mejoraría la vejiga, ocurriendo lo contrario, su mal empeoró, por lo que tuvo que llevarla al hospital para que la atendieran nuevamente. La paciente mejoró, pero insólitamente culpó al médico por no haberle dicho que se abstuviera de beber tanta agua.

Este es el material recibido en Nicaleaks:

Reporte  médico No. 1 y  2

Febrero de 2011

Reporte No. 1

Doña Hila sufrió una urgencia por malestaren la vejiga como a las 11:00PM  llamamos al doctor Avilés y la recibió en su consultorio, le puso de nuevo la sonda y nos venimos  a la casa y al rato le dieron unos  espasmos cada 15 minutos, tan fuertes que  estaba  muy mal así que fuimos a la emergencia del hospital y llamamos al doctor  que nos dijo que le pusieran una buscatina compuesta, además tenía la presión en 175, el doctor  en el hospital habló con el Dr. Aviles y le puso la buscapina compuesta y eso la mejoró como en 15 minutos y la presión le fue bajando paulatinamente. Dice el doctor Avilés  que tomó mucha agua, ya que ella dispuso tomar un vaso de agua cada hora, cosa que no le indicaron los médicos, pero ella  que pensó que era bueno, al contrario le irritó la vejiga por el excesivo peso del agua.

Estaba tan mal que cuando llegamos al hospital ella pedía gritos que le llevaran una buscapina compuesta al carro. Yo le dije aquí te bajas! Y fui a ayudarle a bajarse y la lleve donde la enfermera, después me fui a quitar el carro y a registrarla.

Al final Hilda dice que si no ha sido por el hospital tan cerca se hubiera muerto, que gracias a Dios vivimos tan cerca del Hospital.

La cuenta fue onerosa US$ 18.00

Quiero comenzar reportando  el resultado final del chequeo que  Hilda se hizo por cuatro horas con el Dr. Oviles. Gracias a Dios  todo indica que  está  funcionando normalmente y ya le retiraron la sonda.

Reporte  No. 2

El procedimiento del Dr. Avilés fue después de  revisar las heridas y sus puntadas,  proceder a llenar con una solución salina  unos 350ml. la vejiga a través de la sonda con para ver  cómo  reaccionaba la vejiga, con la vejiga medio llena tomo un ultrasonido, esto lo hizo  para ver si habían espasmos  o incomodidad, una vez  que lleno los 350 ml. sin ninguna molestia ni espasmos procedió a quitar la sonda y mandarla al baño,  luego tomo otro ultrasonido para cerciorarse que la vejiga estaba vacía.

Una  vez  terminado el procedimiento  lo repitió  nuevamente poniendo una sonda muy fina (para bebe) y se comprobó que no había molestia ni espasmos y repitió todo el procedimiento del ultrasonido. Como no había dificultad para orinar decidió  quitarle la sonda, o mejor dicho no ponerle la sonda nuevamente.

El Doctor explicó que eso nunca le había pasado en 300 operaciones, la razón que adujo  es que la vejiga es un músculo y cuando rebasa su capacidad o sea se llena mucho pierde la facultad de contraerse, esta contracción es la que hace orinar, al estar en ese estado se dan los espasmos, además  debido a la inflamación de toda la región y la irritación de la vejiga por la operación esta  se encuentra más propensa a no responder  y  a que suceda lo que pasó.  El Doctor dijo que  todo lo que le pasó a Hilda fue por tomar tanta agua.

Hilda le dijo al doctor,   me hubiera dicho que no tomara  tanta agua.  El doctor dijo que él no se imaginó que ella iba a tomar tanta agua. Hilda le dijo que tomó tanta agua para limpiar la vejiga y que de ahora en adelante le dijera a sus pacientes que no tomaran mucha agua. En la receta que le dio le puso, entre otras cosas, lo siguiente:  “tomar agua gradualmente poco a poco hasta que se normalice la vejiga”

Reportado por  Jaime Chamorro

Esposo y testigo.

 

 

 

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