Farsas viejas y nuevas en escogencia de candidatos

Los partidos políticos de derecha PLC y PLI, en su afán de hacerse pasar por “demócratas” y respetuosos de la libertad que tienen sus miembros para escoger sus candidatos a diputados en las próximas elecciones nacionales, se dedican a tratar de engañar a la población con supuestos sistemas de selección que reemplazarán al acostumbrado y siempre efectivo “dedazo”.  

 

En el PLC, ya su candidato a la Presidencia, el conservador Noel Vidaurre, lo había anunciado ingenuamente en otras ocasiones, ahora le toca el turno a la presidenta de ese partido político, María Haydeé Ozuna, quien sale en defensa de un presunto novedoso y eficaz método de elección de candidatos al que denominaron “meritocracia”.

De acuerdo a Ozuna, en los estatutos de su organización hay varias formas para escoger a sus candidatos, como  asamblea, por consenso, encuesta o bien por primarias, pero el que usarán será uno nuevo y ese es el llamado “meritocracia”, mismo al que se adhirió crédula y ciegamente la fórmula a la Presidencia de la República de ese partido.

El guión aprendido

La dirigente nacional del PLC juró y afirmó, aunque no se sabe si porque está convencida de ello o por orientación política, que en ese sentido los precandidatos deberán ser personas que se lo han ganado trabajando en la estructura partidaria, que verdaderamente sumen votos y dejando a un lado el amiguismo, cuando tradicionalmente es conocido quién elige los nombres para ocupar esos puestos.

En la acera de enfrente, la agrupación que encabeza el PLI y que maneja a gusto y antojo Eduardo Montealegre, anuncia alegremente en sus medios de comunicación, que ya están inscribiendo precandidatos a diputados departamentales, como una forma de dar continuidad al plan elaborado y minuciosamente fraguado por la camarilla eduardista.

En este sistema, copiado y promovido por su aliado EEUU, a como se jacta Montealegre, supuestamente se pretende también eliminar el “dedazo”, pero igual que en el caso del otro partido liberal, se sabe que tras toda esa farsa habrá que ganarse la bendición del “don”; además, disidentes de ese grupo y algunos miembros, han declarado que todo está manipulado para que vuelvan a quedar como candidatos los actuales diputados.   

 

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