Con la participación de delegados de países hermanos y amigos, inicia el segundo Foro de Paz y Solidaridad con Nicaragua, que se desarrollará en Managua durante dos días.
En el foro participan representaciones de ministerios e instituciones de Gobierno, así como de embajadas, poderes del Estado, gobiernos municipales, comunidades religiosas, sacerdotes, pastores y teólogos, entre otros.
El Canciller de Nicaragua Denis Moncada, dio la bienvenida a los asistentes en nombre del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional y les transmitió el saludo del Comandante Daniel Ortega y la Compañera Rosario Murillo.
Moncada agradeció a los presentes por participar y brindar su tiempo al análisis y reflexión sobre el fallido intento de golpe de estado y la ruptura del orden constitucional o derrocamiento por la vía fáctica que han intentado golpistas contra el gobierno legítimo del Presidente Daniel Ortega.
«Nos convocamos y hacemos presencia en este Foro de Paz y Solidaridad con Nicaragua por amor, por sensibilidad humana, por consolidar el bien común, por aislar las tendencias obcecadas por destruir lo positivo, por destruir la patria común para todos con la que soñamos y trabajamos día a día», dijo el Canciller.
Mencionó que este foro tiene una perspectiva y una ruta social y cotidiana.
El Padre Antonio Castro elevó una oración por la paz, señalando que esta es un continuo quehacer y hay que irla construyendo cada día, añadiendo que es un reto para Nicaragua. Dijo que no se puede hablar de paz si no hay justicia y no se puede conseguirla si no hay trabajo.
«Todos somos constructores de paz», indicó. «No son hijos de Dios los que destruyen la paz, no son hijos de Dios los que atentan contra la estabilidad, la seguridad, el crecimiento, el desarrollo, el progreso, el bienestar del pueblo de Dios que quiere vivir en paz, que quiere ser constructor de la paz», resaltó.
El teólogo Jaime Escobar se preguntó qué tiene Nicaragua para ser atacada y detener el proyecto político que se inició con el triunfo de la Revolución Sandinista. Dijo que participan en el foro porque están convencidos que en este nuevo amanecer la paz es al mismo tiempo un don y una tarea y que todos tienen un lugar para aportar.
“En estos foros se comprenderá mejor qué significa ser trabajadores por la paz y la solidaridad, no se trata de inventar o crear la paz, sino de transmitirla, de dejar pasar la paz de Dios y de hombres y mujeres que no aceptan lo que quisieron hacer con Nicaragua, que no se logra entender que ciertos líderes políticos y religiosos intentaron por la vía del terror y caos urbano quitarle al pueblo sencillo y a los jóvenes adscritos a la noble causa sandinista el derecho a soñar y a construir una patria más justa y buena para todos”, añadió.
Saludo del Gobierno al II Foro de Paz y Solidaridad con Nicaragua
Participantes de los Pueblos Hermanos de:
Argentina, Bolivia, Canadá, Chile, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, España, Estados Unidos, Honduras, México, Panamá, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela;
Excelentísimos Miembros del Cuerpo Diplomático Acreditados en nuestro País;
Compañeros de la Juventud Sandinista;
Amigas y Amigos Invitados;
Estimadas y Estimados amigos, compañeros, hermanos:
Bienvenidos a Nicaragua, tierra de lagos y volcanes patria de Rubén Darío poeta universal. Bienvenidos a la patria de Sandino General de Hombres y Mujeres libres, símbolo de patriotismo, de soberanía, de libertad, de lucha anti-imperialista y de fraternidad y solidaridad entre nuestros pueblos.
Con mucho cariño y respeto transmitimos a Ustedes el fraterno saludo del Compañero Comandante Daniel Ortega Saavedra Presidente de la República y de la Compañera Vice Presidenta Rosario Murillo, agradeciéndoles su presencia y participación en este “Foro de Paz y Solidaridad con Nicaragua”.
Muchas gracias por su solidaridad, por dedicar parte de su valioso tiempo al análisis y reflexión sobre el intento de golpe de Estado, Ruptura del Orden Constitucional y derrocamiento por la vía fáctica, por la vía de hecho que han intentado golpistas contra el Gobierno legítimo del Presidente Ortega.
La confabulación interna y externa que ha sido neutralizada y derrotada, ha pretendido desconocer el Estado de Derecho nicaragüense y ponerle fin a nuestro Gobierno electo constitucionalmente y que ha impulsado la democracia incluyente, directa y participativa con decidida vocación popular por el Bien Común de los nicaragüenses, sin exclusiones.
Algunos sectores de la Conferencia Episcopal de la Iglesia Católica de Nicaragua han reconocido y aceptado su participación activa en esos hechos delictivos que han costado muchas vidas, destrucción de infraestructura pública y privada, afectando la Paz, la seguridad, la estabilidad y el progreso alcanzado por nuestro Gobierno en los ámbitos económico, social, de género, cultural y de seguridad de nuestro País.
Esos sectores eclesiásticos han sustituido su labor Católica, Apostólica y Romana por la conspiración, el terrorismo y el golpismo, desnaturalizando su misión y valores cristianos, manipulando la religión con fines políticos de desestabilización, de ruptura del orden constitucional y de cambio ilegal de Gobierno.
Han utilizado la Institución Eclesiástica Católica para planificar y organizar el caos con sectores internos y externos de ultra derecha en perjuicio del pueblo nicaragüense, pretendiendo quebrar el cántaro de Paz y de Fe en el presente y el futuro que ha sido y continúa siendo Nicaragua.
Nos convocamos y hacemos presencia en este Foro de Paz y Solidaridad con Nicaragua, por amor, por sensibilidad humana, por consolidar el Bien Común, por aislar las tendencias obcecadas por destruir lo positivo, por destruir la patria común para todos con la que soñamos y por la que trabajamos día a día.
Por eso es que este Foro por la Paz y la Solidaridad con Nicaragua tiene una perspectiva y una ruta social y cotidiana ya que como lo afirmara Gandhi no hay Camino para la Paz, la Paz es el Camino, y agregamos, Paz con hermandad, solidaridad, respeto, armonía y humanismo para lograr acuerdos de acercamiento a pesar de nuestras diferencias.
Saludamos también a nuestros amigos fraternos de la Comunidad San Pablo Apóstol por su vocación de Reconciliación, Paz y manifestaciones objetivas sobre los intentos golpistas y la participación de los sectores eclesiásticos involucrados.
El Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional es un Gobierno de encuentro con nuestros semejantes, empeñado en llevar a cabo sus funciones y sus políticas públicas en el marco del cristianismo, con base en principios socialista, compartiendo la justicia social con el pueblo nicaragüense, con vocación de solidaridad con todos los ciudadanos del País con independencia de sus posiciones política y religiosas.
En este ámbito de búsqueda y encuentro con nuestros semejantes, coincidimos y convergemos trabajando juntos por la Paz, por la unidad, la reconciliación, la amistad y la solidaridad. Esperando que los resultados de este encuentro entre hermanos, amigos y camaradas trascienda las fronteras de Nicaragua, que lleguen hasta los centros de poder Ecuménico Universal con el objetivo de motivarlos a favor de la Paz y la Reconciliación Nacional e Internacional.
Muchas Gracias.