* Fuentes gubernamentales informaron que el atentado terrorista contra Abdullah al-Thani no dejó muertos.
Un grupo de hombres fuertemente armados intentó asesinar el martes al primer ministro de Libia, Abdullah al-Thani, cuando iba camino al aeropuerto en la ciudad de Tobruk (oriente), informó un portavoz del gobierno interino.
El hecho ocurrió en plena vía cuando la caravana de escoltas del funcionario fue sorprendida por los sujetos, que dejaron levemente herido a uno de sus guardias, dijo el jefe de la prensa del Gobierno, Arish Said, cita la agencia Associated Press.
«(Los agresores) lograron escapar», afirmó Said. Al-thani se encontraba en la Cámara de Representantes de Tobruk antes del ataque; a fuera del Parlamento cientos de personas protestaban e intentaban irrumpir en el recinto para pedir frente a los legisladores la destitución del primer ministro.
«Amenazaban (los manifestantes) con matar al primer ministro y obligar a la cámara a que lo destituyera», agregó Said. Añadió además, que “el automóvil del primer ministro fue impactado por varios proyectiles cuando hombres armadas abrieron fuego, y las autoridades abandonaba la zona donde se había realizado una sesión del Parlamento”.
Ningún grupo extremista se adjudicó el ataque, pero los jefes de Tobruk aseguran que los que dispararon contra la camioneta del primer ministro “son pagados por financieros políticos corruptos».
La sesión legislativa fue pospuesta hasta la semana próximo debido al intento de asesinato. El país está sumido en el caos a casi cuatro años del derrocamiento del presidente Muamar Gadafi.
Ahora la nación perteneciente al continente africano, está dividida en dos bandos: un parlamento elegido y un gobierno débil que enfrentan el asedio de bandas extremistas en Trípoli (ciudad bastión) y en Bengasi (capital).
La política se ve empañada por fuerzas radicales del autodenominado Estado Islámico y paramilitares leales al gobierno que se enfrentan entre ellos para tomar el control de la nación. Esta situación ha obligado al primer ministro a instalarse en las ciudades orientales de Tobruk y Bayda. Las fuerzas del Estado Islámico controlan dos ciudades en la costa del país
Cabe recordar que Al-thani había sido amenazado por el jefe tribal de Tobruk, Faraj Abu Aljatabia, por la emisora privada Liwya Awalan. «Este primer ministro debe renunciar, si no lo hace le aplastaré la cabeza», afirmó. «O se va o no permitiremos la permanencia de la Cámara de representantes en Tobruk».