El gobernador del departamento de Santa Cruz pasará su condena en la prisión de máxima seguridad de Chonchocoro en La Paz.
La Justicia boliviana dictó este viernes cuatro meses de detención preventiva para el gobernador del departamento de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, en el marco del caso ‘golpe de Estado I’ por la crisis de 2019.
El político opositor pasará su condena en la cárcel de máxima seguridad de Chonchocoro en La Paz.
La resolución se produjo luego de una maratónica audiencia virtual de más de siete horas en que la Fiscalía pedía seis meses de prisión preventiva para el gobernador, al que acusa del delito de terrorismo.
El abogado de la Procuraduría General, Kaleff Clemor, responsabilizó a Camacho de haber presionado a Evo Morales para que presentara su renuncia a la Presidencia en noviembre de 2019. Denuncia que el imputado pidió que el entonces mandatario dejara el cargo y que, de la misma manera, habría incidido en las Fuerzas Armadas para que actuaran contra Morales.
Mientras tanto, la comisión de fiscales pidió la detención de Camacho en la prisión de Chonchocoro durante seis meses, al considerar que existen riesgos procesales, entre ellos el hecho de que el detenido no posee un domicilio habitual, que su familia puede obstaculizar las investigaciones, y la declaración de los otros implicados en caso de que continúe en libertad.
Por su parte, los representantes legales de Camacho pidieron que se libere a la autoridad departamental, denunciando la vulneración de sus derechos humanos y constitucionales.
Durante la audiencia, el gobernador cruceño afirmó que no cometió ningún delito, alegando que solo participó en la lucha del pueblo por la democracia. «A mi pueblo que me eligió le digo que nunca me voy a rendir y que esta lucha es por la democracia de Bolivia», declaró.
La Fiscalía General del Estado de Bolivia confirmó la tarde del miércoles que Camacho fue detenido por el caso ‘golpe de Estado I’. Como consecuencia, cientos de simpatizantes del político y del Comité Cívico Pro Santa Cruz salieron a las calles de la ciudad de Santa Cruz y se movilizaron de inmediato para irrumpir las pistas de los aeropuertos de El Trompillo y Viru Viru e impedir el despegue de las aeronaves. En el marco de las protestas se registraron choques entre manifestantes y la Policía antidisturbios.