Y siguió el despecho del narcoestafador Gerardo Sánchez en contra de Vanessa Silva, alias “Pepples García” y “Vani”. La somocista y gringa caituda, Olga Juárez, volvió a prestarse como informante y aliada para desmoralizar a la mujer que presuntamente había jugado con los sentimientos del guerrillero de la laptop.
Fotos íntimas, conversaciones personales, dirección, cedula de identidad, todo lo que se pudiera conseguir de Vanessa Silva fue útil para esta guerra a través de Facebook con sabor a encono y frustración amorosa, que protagonizó el asesino de una muchacha policía “Voz Solidaria”, cabecilla de la virtual Coordinadora Guerrillera Nicaragüense (CGN).
La “zorra” fue la forma de dirigirse a la mujer que dejó plantado a Sánchez, quien en algún momento hizo planes para quedarse en Estados Unidos a través de la “Pepples”, quien al parecer tenía ciudadanía.
Un trozo de la plática entre el narcoasesino Gerardo Sánchez y la somocista Olga Juárez: