Prensa Latina
El secretario general de la ONU, António Guterres, instó a trabajar incansablemente para liberar a todas las sociedades de la lacra del racismo, en su mensaje en ocasión hoy del Día Internacional de los Afrodescendientes.
La fecha, que por primera vez se celebró el pasado año por iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas, encomia la diversidad del legado y la cultura de las personas afrodescendientes y su enorme contribución “a nuestras sociedades a lo largo de la historia”, subrayó Guterres.
Sin embargo, en todo el mundo, millones de personas afrodescendientes siguen siendo víctimas de racismo y de una discriminación racial profundamente arraigada y sistémica, dijo.
Por ello, -apuntó- la ONU exhorta a que se respeten de manera plena sus derechos humanos y libertades fundamentales y se les ofrezca reparación cuando estos se vulneren. El titular del organismo multilateral recordó en ese sentido “el daño atroz causado por la esclavitud y el colonialismo”.
El Foro Permanente de Afrodescendientes, cuya creación es un importante logro del Decenio Internacional de esas poblaciones (2015-2024), tendrá su primer período de sesiones en diciembre, anticipó Guterres.
La Asamblea General solicitó al Grupo de Trabajo Intergubernamental sobre la Aplicación Efectiva de la Declaración y el Programa de Acción de Durban que elabore una declaración de las Naciones Unidas sobre la promoción y el pleno respeto de los derechos humanos de los afrodescendientes.
El Foro contribuirá a esta importante labor, apuntó al insistir que es esencial “que sigamos denunciando —en voz alta y sistemáticamente— cualquier noción de superioridad racial”.
Al cumplirse en 2020 la mitad del Decenio Internacional de los Afrodescendientes, la ONU admitió que, si bien se han logrado algunos progresos legislativos, normativos e institucionales, aún sufren formas de discriminación racial, marginación y exclusión.
La pandemia de la Covid-19 puso de manifiesto la urgencia de abordar las persistentes desigualdades estructurales y el racismo sistemático en la salud, señaló.
Al propio tiempo –enfatizó-, la falta de reconocimiento sigue siendo uno de los principales obstáculos que impiden el disfrute pleno y efectivo de los derechos humanos por los afrodescendientes.