Prensa Latina
A medida que se acercan las elecciones de 2024 en Estados Unidos, estrategas y trabajadores electorales intentan asegurar el voto en territorios del país donde ese derecho es hoy drásticamente más difícil.
“Podría decirse que, en cierto modo, tenemos más restricciones al derecho al voto que las que teníamos el día después de que se firmó la Ley de Derecho al Voto en 1965, se ha debilitado desde entonces hasta ahora”, advirtió Cliff Albright, cofundador y director ejecutivo de la organización de base Black Voters Matter.
El grupo, que centra su trabajo en los nueve estados centrales: Texas, Misisipi, Luisiana, Alabama, Georgia, Florida, Carolina del Norte, Michigan y Pensilvania, alertó que las leyes electorales en 2024 son en gran medida más restrictivas que en 2020.
Entre octubre de 2022 y octubre de 2023, se introdujeron al menos 881 leyes en las legislaturas estatales para interferir en las elecciones o restringir el derecho al voto, destacan medios locales. Si bien 2020 fue un momento decisivo para mejorar el acceso de los votantes a través del voto por correo, al menos 11 nuevas leyes promulgadas el pasado año redujeron su uso.
Algunas iniciativas legislativas recientemente promulgadas permiten la interferencia del Estado en las elecciones como la SB 1 de Texas, que da potestad a los funcionarios locales a intervenir directamente en las elecciones celebradas en el condado de Harris, uno de los más poblados y diversos de esa parte del país.
Aunque también algunos estados han adoptado leyes electorales amplias que facilitan votar por correo, registrarse para ejercer ese derecho y hacerlo anticipadamente como Oregón y Nueva York, que son liderados por demócratas.
Por otra parte, «la amenaza de la información errónea y la desinformación es real”, opinó Juan Gilbert, informático y miembro del Comité de Academias Nacionales sobre el Futuro de la Votación.
«Lo vimos en 2020 y anticipo que probablemente será el mayor motivo de preocupación en 2024», subrayó Gilbert, citado por el sitio Truthout.
El 57 por ciento de los estadounidenses de entre 18 y 34 años dicen que es muy probable que voten el 5 de noviembre, de acuerdo con datos de una encuesta de noviembre del Centro de Información e Investigación sobre Aprendizaje y Compromiso Cívico.
Pero al mismo tiempo, la desilusión con la financiación del genocidio de Israel por parte de la administración Joe Biden en Gaza podría provocar la abstención en un porcentaje de votantes jóvenes, alertó el medio digital.
Para Albright, los expertos políticos deberían tener cuidado de no subestimar el malestar que muchos electores jóvenes y negros tienen por el apoyo de Biden a Israel. “Perder… cinco, 10 o 15 por ciento en los márgenes en algunos estados como Georgia o Michigan, esa puede ser la diferencia”, sentenció.