El libro Nicaragua 2018: ¿levantamiento popular o golpe de Estado?, una investigación sobre los acontecimientos que desestabilizaron al país entonces, fue presentado en esta capital por sus autores.
Un grupo de periodistas, investigadores y activistas, todos residentes en el país, recopilan en el volumen meses de entrevistas, investigaciones y análisis con el objetivo de mostrar al mundo la verdadera naturaleza de los acontecimientos que la oposición llamó “protestas pacíficas”.
Esas “muestras de civismo” son expuestas con rigor, también los crímenes y destrucción causados a la infraestructura del país asociados a lo que el gobierno de Nicaragua califica de “intento de golpe de Estado”, dado que su fin era la salida del presidente Constitucional Daniel Ortega.
Cifras actualizadas por la Comisión de la Verdad, Justicia y Paz, afirman que la intentona golpista dejó un saldo de 253 muertos, dos mil 18 heridos, 927 privados de libertad, y pérdidas económicas superiores a los mil millones de dólares.
Nicaragua 2018: ¿levantamiento popular o golpe de Estado?, también muestra los vínculos entre el sector empresarial del país con los actos de violencia, al exhibir evidencias que demuestran contrataron a bandas delincuenciales para crear el caos, entre otros elementos que prueban “las protestas” no fueron resultados de acciones espontáneas, sino bien organizadas y financiadas.
La autora del prólogo, la investigadora Gabriela Luna, destacó varios de los valores que a su juicio tiene el libro, entre ellos que sus autores fueron testigos activos de los hechos recogidos en sus más de 300 páginas.
Resaltó también la organización del libro, que tiene por objeto “permitir a los lectores, educadores, periodistas y aquellos que buscan la verdad, estudiar independientemente los acontecimientos de 2018 desde diferentes ángulos: derechos humanos, medios de comunicación, economía, religión y geopolítica”.
A juicio de la investigadora Nicaragua 2018: ¿levantamiento popular o golpe de Estado?, “procura ser accesible, rigurosamente investigado, políticamente relevante y oportuno”.
En el prólogo lo cataloga de necesario para entender los conflictos de esta naturaleza, llamados “de cuarta generación” y que son definidos por el uso, entre otros elementos, por la guerra asimétrica, de baja intensidad, sucia, terrorismo de estado, u operaciones encubiertas bajo la denominación de guerra popular, civil, terrorismo y contraterrorismo.
El objetivo principal de la guerra de cuarta generación es lograr cambios de sistemas políticos o gobiernos, y a tono con la revolución tecnológica también hace uso de la información, la contrainformación, noticias falsas y campañas mediáticas coordinadas.