La aeronave presidencial estaba preparándose para el aterrizaje, cuando varios pasajeros a bordo notaron un vehículo aéreo no tripulado cerca.
El avión presidencial de Donald Trump casi fue impactado por lo que parecía ser un pequeño dron cuando se aproximaba a un aeropuerto cercano a Washington el domingo por la noche, reporta Bloomberg, citando a varios testigos que estaban a bordo en ese momento. Trump se encontraba en el Boeing Co. 757 modificado, conocido como Air Force One.
La aeronave con el mandatario estadounidense estaba preparándose para el aterrizaje, cuando varios pasajeros a bordo notaron un vehículo aéreo no tripulado al lado derecho del Air Force One. El objeto avistado era amarillo y negro, y tenía forma de cruz, según reportes.
El incidente ocurrió poco antes de que el avión aterrizara a las 17:54 (hora local) el domingo. Junto con cierto personal de apoyo, periodistas suelen acompañar al presidente en el Air Force One. El corresponsal de AFP en la Casa Blanca, Sebastian Smith, también estaba a bordo y tuiteó sobre el incidente pocos minutos después de su llegada.
El Servicio Secreto no respondió de inmediato a una solicitud para confirmar los informes. El Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte remitió las preguntas al Servicio Secreto. Por su parte, la Administración Federal de Aviación (FAA) remitió preguntas sobre el asunto a la Fuerza Aérea.
¿Son peligrosos los drones para los aviones?
Si bien ha sido notoriamente difícil para los investigadores de seguridad de la aviación verificar eventos tan fugaces, este parece estar entre los miles de incidentes de seguridad que involucran a dispositivos no tripulados en EE.UU., según el medio.
La FAA recibe miles de informes al año que señalan que drones vuelan demasiado cerca de otras aeronaves u operan en áreas restringidas.
La mayoría de los drones civiles pesan solo unos kilos como máximo y probablemente no podrían derribar un avión de pasajeros. Pero una investigación del Gobierno sugiere que el daño podría ser mayor que el de un pájaro de tamaño similar, que podría romper el parabrisas de la cabina o dañar un motor.
Ha habido varios casos en los que drones realmente impactaron contra aviones, pero ninguno resultó en un accidente o lesiones graves, según datos de la Junta Nacional de Seguridad del Transporte de EE.UU.