Facebook es la última compañía en unirse a este selecto club formado por Siri (Apple) y Cortana (Microsoft), entre otros. Así lo ha adelantado Wired, aunque de momento se trata sólo de una prueba piloto para unos pocos cientos de afortunados usuarios de EEUU.
El asistente virtual, bautizado de momento como M, está implementado en la aplicación Messenger. «Puede hacer tareas que ninguno de los otros asistentes puede», asegura el vicepresidente de productos de mensajería de Facebook, David Marcus. Y podría ser verdad, porque tras este servicio hay gente de carne y hueso.
Mientras que Siri o Cortana son programas, avanzados pero con sus limitaciones, M tiene además un equipo humano detrás. Se trata de un sistema que ya utilizan empresas como TaskRabbit, que emplea a gente para responder a peticiones de texto. Al añadir un ser vivo a la ecuación se multiplican sus posibilidades: cosas imposibles para la asistente de Apple, como reservar mesa para dos en un restaurante, se vuelve factible.
La pregunta, como siempre, es «¿Qué saca Facebook de todo esto?». El objetivo de Marcus es atraer a más y más clientes a su plataforma, lo que finalmente supondría ingresos en materia de publicidad y ventas.
Sin duda es una buena forma de potenciar el uso de Messenger, denostado (y hasta boicoteado) por muchos usuarios que prefieren tener todos los servicios de la red social en una misma aplicación.