El ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva aceptó hoy integrar el gobierno que encabeza Dilma Rousseff y será el nuevo ministro-jefe de la Casa Civil, así se anunció en el Palacio de Planalto.
Lula reemplazará en el puesto a Jaques Wagner, quien asumirá la jefatura del Gabinete personal de la Presidencia de la República.
En un comunicado, la sede del Ejecutivo anunció además el nombramiento de Mauro Ribeiro Lopes al frente de la Secretaría de Aviación Civil.
El nombramiento de Lula era esperado desde anoche, cuando él y la mandataria sostuvieron una reunión en el Palacio de Alborada que se extendió por más de cuatro horas, según medios de prensa.
Desde que se anunció la posible incorporación del ex mandatario al equipo de Rousseff fue manifiesto el apoyo de legisladores y dirigentes del gobernante Partido de los Trabajadores (PT), cuyo presidente nacional, Rui Falcao, indicó que esa debía ser una decisión estrictamente personal de Lula.
Hay muchos argumentos, a favor y en contra, y todos son aceptables; pero en caso de que resuelva incorporarse al gobierno, él tiene mucha autoridad, respeto y fuerza para ayudar a Brasil en este momento.
En opinión del sociólogo y cientista político Emir Sader, la primera tarea del ex gobernante será recomponer la capacidad de articulación del gobierno, en especial con el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), «por el propio carácter pendular y decisivo» de esa fuerza en el Congreso.
Además, tendrá que tratar de que la política económica varíe, si no de forma brusca por lo menos gradual, pero dando señales claras de que el cambio vendrá.Sería muy difícil para Lula estar allí sin que ese tema, central en sus divergencias, sea alterado, subrayó.
Por su parte, el diario digital 247 publicó ayer un artículo de la columnista Tereza Cruvinel, quien sostuvo que Lula tratará de utilizar todo su capital político para rescatar la gobernabilidad del país y el apoyo de la base social, así como para derrotar el proceso de impeachment contra la Presidenta.
En una carta abierta difundida tras las multitudinarias manifestaciones antigubernamentales, el teólogo Leonardo Boff pidió al fundador del PT incorporarse al aparato gubernamental, ante el riesgo de que se pierdan las conquistas alcanzadas por las administraciones petistas para los más vulnerables del país.
Con usted en la negociación estaremos seguros de contar con alguien que, con autoridad y poder de convencimiento, ayudará a conducir a una solución política y social que salve a nuestra frágil democracia y garantice la continuidad de las medidas sociales humanizadoras, subrayó.
Líderes de la oposición en la Cámara de Diputados, en tanto, anunciaron ayer que acudirán a la justicia federal para intentar impedir el nombramiento de Lula con lo cual, sostienen, se pretende blindar al ex mandatario, quien es investigado por la cuestionada operación anticorrupción Lava Jato.