La propuesta de Arturo Zaldívar, ministro de la Suprema Corte de Justicia de México, para legalizar la marihuana con fines terapéuticos ha dado nueva vida al debate sobre la legalización del país.
La deliberación que los jueces llevarían a cabo este miércoles y que ha sido aplazada para la próxima semana para poder tratar a fondo el tema, ha obligado a los partidos políticos a asumir posiciones sobre un tema que ha rondado la opinión pública desde que el Gobierno de Felipe Calderón inició la guerra contra el narcotráfico en 2006, un conflicto que dejó más de 80.000 muertos y 20.000 desaparecidos.
Uno de los políticos más visibles de la izquierda, Miguel Ángel Mancera, jefe de Gobierno de la Ciudad de México, dijo el martes que la capital del país está lista para legalizar la droga para fines terapéuticos. “No se debe rehusar el debate. Creo que la Cámara de Diputados debe participar en esto”, afirmó el político, que enfrenta una ola de violencia en la ciudad, parte de ella generada por bandas de narcomenudeo.
El PRI, el partido en el poder, ha lanzado una encuesta en su páginade internet para saber qué tan respaldado es el tema por la sociedad. Un estudio de opinión elaborado por el Congreso en mayo de 2014 mostró que el 70% de los mexicanos está en contra de la legalización. Margarita Zavala, la esposa del presidente Calderón –cuya imagen está relacionada a la sangría que sufrió México por el combate a los cárteles– y quien tiene aspiraciones presidenciales rumbo a 2018 ha propuesto realizar una consulta ciudadana para la legalización con fines recreativos.
El comisionado contra las adicciones del Gobierno federal, Manuel Mondragón, un médico que tiene experiencia en el combate contra los delincuentes, ha rechazado el respaldar el proceso. “No quiero una sociedad adicta a la marihuana”, dijo en un evento en la Universidad Nacional esta semana. Asegura que el uso de la droga ha crecido en los últimos años y que los mexicanos son cada vez más jóvenes cuando la prueban por primera vez (a los 12 años). “Casi la mitad de los consumidores son menores de edad”, agregó. Su oficina elaborará para el próximo año una encuesta de adicciones en todo el país para actualizar los últimos datos, de 2011.
El proyecto del juez Zaldívar pretende amparar a la Sociedad Mexicana de Autoconsumo Tolerante y Responsable, un club de cannabis que hace dos años solicitó al Gobierno permisos para cultivar plantas de marihuana con fines de consumo recreativo, lo que fue rechazado. El ministro cree que no corresponde al Estado limitar las libertades. “Pertenece a la autonomía individual… la posibilidad de decidir responsablemente si desea experimentar los efectos de la sustancia”, dice el documento. En el país, la posesión de pequeñas cantidades está despenalizada desde 2009, pero los expertos consideran que los montos tolerados son tan insignificantes que es fácil criminalizar a los usuarios.
La justificación de Zaldívar afirma que el consumo de la marihuana en personas adultas “no supone un riesgo importante para la salud” si no se utiliza de forma “crónica y excesiva”. Las afectaciones son “menores o similares” a las que producen sustancias no prohibidas como el alcohol o el tabaco, dice el ministro. Para que su propuesta prospere debe ser respaldada por tres de los cinco jueces de la sala.
Una mayoría dejaría sin efecto los artículos 235, 237, 245, 247 y 248 de la Ley general de Salud. El primero aprueba la siembra, cultivo, preparación y posesión de estupefacientes exclusivamente para fines médicos y científicos. El segundo prohibía usar para estos fines la cannabis sativa (marihuana), además de otras sustancias como el opio y la heroína. El resto de artículos regulaba y clasificaba las sustancias psicotrópicas. El amparo solo beneficiaría a la marihuana. La declaratoria de inconstitucionalidad “no supone en ningún caso autorización para realizar actos de comercio, suministro o distribución” de la sustancia.