El presidente de EE.UU., Joe Biden, dio este jueves una importante conferencia de prensa al margen de la cumbre de la OTAN, en la que se esperaba que demostrara que tiene capacidad para representar los intereses de sus partidarios en las próximas elecciones de noviembre. Una intervención que se anunció como importante luego de su desastrosa actuación en el reciente debate contra Donald Trump.
No obstante, una serie de meteduras de pata –como referirse por error a la vicepresidenta Kamala Harris como «vicepresidenta Trump» e ideas poco concluyentes– ensombrecieron su desempeño y supusieron un fracaso a la hora de detener la hemorragia de deserciones entre los demócratas, que piden que el mandatario, de 81 años, se haga a un costado en la carrera presidencial.
Más demócratas abandonan el barco
El principal demócrata del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Jim Himes, solicitó que Biden abandonara la contienda apenas terminada la rueda de prensa. «Las elecciones de 2024 definirán el futuro de la democracia estadounidense y debemos presentar al candidato más fuerte posible para enfrentar la amenaza que representa el autoritarismo ‘MAGA’ prometido por Trump», escribió en su cuenta de X. «Ya no creo que ese [candidato] sea Joe Biden», afirmó, agregando que el «legado» del líder demócrata está en riesgo.
En esa línea, el representante Scott Peters, de California, también argumentó que Biden debería abandonar la contienda. «Hay mucho en juego y estamos en una trayectoria perdedora», opinó, citado por The New York Times.
De acuerdo con el periódico The Washington Post, es muy posible que la actuación de Biden mantenga al Partido Demócrata «en un estado de purgatorio», en el que el presidente se sienta «envalentonado para continuar», aunque las preocupaciones no desaparezcan.
Asimismo, cuatro fuentes del partido político le adelantaron a CBS News que esperan que docenas de legisladores demócratas pidan al actual inquilino de la Casa Blanca que no se presente a las elecciones. Una de las personas consultadas aseguró que los próximos tres o cuatro días serán «brutales» y que la semana que viene podría resultar insostenible para las aspiraciones de la reelección de Biden.
No obstante, otros miembros afirmaron a NYT que la «hábil comprensión» de las políticas por parte del presidente, y el hecho de que respondiera preguntas durante una hora, «era alentador». «Cualquiera que esté preocupado por su capacidad para liderar y gobernar debería estar tranquilo», expresó el senador Chris Coons, de Delaware, uno de los aliados más cercanos del mandatario.
¿Qué dice el electorado?
Momentos previos a la conferencia, The Washington Post publicó una encuesta que muestra que el 56% de los votantes demócratas opinan que Biden debería ser reemplazado, un poco más que en los sondeos anteriores. Estas cifras contradicen unas declaraciones anteriores del mandatario en las que dijo que «el demócrata promedio que está ahí afuera […] todavía quiere que yo sea el candidato». Además, más de ocho de cada 10 votantes registrados ahora están de acuerdo en que Biden es demasiado mayor, una de las cifras más altas hasta la fecha.
Por su parte, la CNN destacó en una publicación que es probable que la actuación del mandatario no cambie la opinión de muchas personas. Aquellos demócratas contrarios a la candidatura se aprovecharán de los deslices garrafales durante la rueda de prensa, mientras que los partidarios «señalarán que respondió hábilmente a una variedad de preguntas sobre política exterior», indicó.
«Es otro desastre»
Entre tanto, algunos conservadores calificaron la rueda de prensa como un «desastre». «Esta conferencia de prensa de la OTAN con Biden es otro desastre. Es inexplicable que la gente que asesora a este hombre siga pensando que de alguna manera no se va a humillar a sí mismo ni a este país. ¿Por qué siguen permitiendo que esto suceda?», escribió la colaboradora de Fox News Tammy Bruce en su cuenta de X.
«Esta conferencia de prensa es un desastre. Joe Biden no responde las preguntas», expresó por su parte el reportero Leo Terrell.
Episodios incómodos
En esa misma rueda de prensa es cuando el actual inquilino de la Casa Blanca tuvo la confusión –descrita anteriormente– de los apellidos de la vicepresidenta Kamala Harris y del expresidente Donald Trump, diciendo: «No habría elegido a la vicepresidenta Trump para ser vicepresidenta si no creyera que está cualificada para ser presidenta».
«Estoy siguiendo el consejo de mi comandante en jefe», afirmó en otro momento Biden, quien como presidente también se desempeña como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas. De esta forma respondió a una pregunta sobre el suministro de armas a Ucrania.
Las nuevas meteduras de pata se produjeron apenas unas horas después de que Biden desatara una ola de risas en la sala de diplomáticos de la OTAN al presentar erróneamente al líder del régimen ucraniano, Vladímir Zelenski, por el nombre de su contraparte en el conflicto, el presidente ruso, Vladímir Putin.